El próximo sábado 28 de Septiembre vuelve el ciclo Sol-Luna a iniciarse, es Luna Nueva.

Sol y Luna se encuentran al principio de Virgo sideral (astronómicamente hablando). Además, Virgo es una constelación muy larga (ocupa mucho en la elipse, en lo real).

Marte (lo que activa, la energía) les anda cerca, no demasiado, a unos 9º, a punto de dejar de hacer aspecto y ningún planeta aspecta la unión Sol-Luna. No así la Luna Llena que viene, que será movida energéticamente hablando.

Virgo representa el trabajo humilde de cada día. El esfuerzo, la siembra. La pureza, el análisis.

Esta Luna Nueva es un momento para bajar a Tierra, para hace dietas depurativas (especialmente los dos dias antes de la Luna Nueva por la noche, muy buenas para soltar y dejar ir).

Virgo representa los intestinos, la asimilación (en cualquier sentido, claro, hablamos de simbología) por lo cual es un momento para recapacitar y cambiar el orden de prioridades, interiorizar, reconsiderar y ponerse a trabajar en la nueva dirección, poco a poco, día a día, paso a paso.

La energía empieza a bajar a las raíces, a la tierra. Es momento para recolectar, elegir, depurar. La tarde-noche intensifica esta energía.

Estos días son energéticamente ideales para crear preparados depurativos, para hacer limpiezas y para determinar qué no necesitamos más. Por ejemplo, hacer una ritual de desapego psicológico o de abandonar cierto programa, cierta costumbre, especialmente cuando el Sol se empieza a esconder bajo el horizonte y dos días antes de la Luna Nueva, en Luna menguante.

Se dice que lo que pase de uno a dos días antes de una Luna Nueva, es decir, en mengüante es un cambio, una transición a algo nuevo. De hecho, si hay algún acontecimiento importante en estas fechas, las próxima vez que se encuentren los intervinientes en el mismo, el cambio será significativo.

Luna y Sol hacen un quincucio exacto a Urano, en Aries. La posibilidad del cambio está abierta, a elección.

El día 3 de Octubre Plutón se gira a directo, cuando lleva en retroceso (aparentemente va hacia atrás) desde el 24 de Abril (un poco antes que Saturno). Esto provocará verdaderos cambios (no sólo aparentes, sino profundos) que han estado esperando a manifestarse desde esa fecha.

Los cambios se empiezan a producir en este Otoño, momento de recolección.

Que tu cosecha sea fructífera, te deseamos, desde AstroSideral.