Poderosísima luna llena que se produce el viernes 22 a las 6 h 23´de la madrugada. Y es potente por varios motivos.
Hay varios planetas en un signo que los empodera porque refuerza su significado simbólico: Sol en Aries, Venus en Piscis y Marte en Escorpio. Cuando esto ocurre, es decir, hay muchos planetas fuertes en un mapa, las circunstancias que se generan a raíz de sus energías permanecen en el tiempo, tienden a ser duraderas. En este caso, esto se refuerza aún más por las casas o divisiones de la elíptica que ocupan, que también los empoderan.
Otro motivo es que el Sol está justamente ascendiendo y la Luna descendiendo en el momento más exacto de la luna llena. Sol y Luna en el horizonte. Se amplía el brillo de ambos.
Liderar o seguir, luchar o armonizar, iniciar o acompañar, expandir o reflejar, masculino o femenino se entretejen en un baile donde estas energías pueden manifestarse como opuestas, siendo una.
Cerca del horizonte, cualquier planeta o luminaria se aprecia de mayor tamaño. Aunque sólo sea una percepción visual el simbolismo se traslada. Astrológicamente, las casas angulares son especialmente relevantes, sobre todo cerca del cúlmen como es el caso. También ocurre esto en astrología védica o indú que tiene una gran fama de ser certera en sus predicciones y que por cierto, utiliza la astrología sideral, no tropical.
Un tercer motivo es que el significativo trino Júpiter-Plutón que lleva meses activo se cierra con Mercurio esta luna, formando un gran trino, es aspecto más armonioso que puede tener un mapa astrológico. Plutón es el poder, el inconsciente o la sombra y Júpiter en conjunción al nodo norte, en Leo y en la V aporta la sabiduría necesaria para abrir el camino al cambio, a lo nuevo e inexplorado. En Leo se vuelve poderosamente creativo. En estos días cierra el aspecto Mercurio, la mente consciente, los datos, la comunicación, los encuentros. Traducción: hemisferio derecho e izquierdo, Júpiter y Mercurio, sabiduría o simbolismo y datos o comunicaciones respectivamente, en armonía para el cambio y la transformación: Plutón y el nodo norte.
Además, se dan varias «casualidades» en el mapa de esta luna llena. Por ejemplo, Lilith y Luna coinciden. Lilith es la llamada luna negra y es un punto astronómico que tiene que ver con el plano de recorrido de la Luna con respecto de la Tierra, podríamos llamarla la sombra o el lado opuesto de la Tierra respecto del plano elíptico de la Luna. Representa el poder oculto de la energía femenina, el matriarcado. Lilith, siendo femenina, es rebelde, no sumisa, chamánica, consciente de su valor, terrenal al tiempo que espiritual. No se impone ni se supedita. Tiene su lugar en el cosmos porque tiene que ver la con la energía tierra que representa.
En este mapa coinciden Luna, Lilith y rueda de la fortuna en el descendente. El Sol, poderoso en Aries, el guerrero, ascendiendo, abriendo caminos, tiene su reflejo en esta poderosa Luna, que se oculta en el horizonte en Libra, consciente de su valor, en un papel de espejo tal vez, oculta, pero por ello, no menos poderosa, llevando consigo la sabiduría chamánica de Lilith junto a la buena fortuna, «la suerte».
El nodo sur, que representa el pasado, lo conocido, lo experimentado, conjunta a Quirón y a Neptuno en Acuario en la XII. Las emociones grupales acumuladas del inconsciente colectivo buscan sanación en los otros, para todos, para el grupo. No es un dolor individual, se ha vuelto compartido y tiene la capacidad de transmutación que toda enfermedad o padecimiento tiene. En la oscuridad está la luz, en la comprensión de lo que ocurre realmente, simbólicamente, está la vida.
La casa XII o inconsciente, la materialización, está particularmente activa. La verdad del amor, Venus en Piscis junto a Urano, tiene la capacidad de transmutar las rémoras que obstaculizan la transformación, representadas en este mapa en Saturno en Escorpio en la VIII y la cuadratura de Plutón en Sagitario.
Por amor, gratitud, altruismo se llevan a cabo grandes empresas. Las energías de este mes las potencian, revelan, apoyan.
Hay mucho sanador herido que busca sanar a otros con la capacidad del dolor o la enfermedad transmutada: Quirón. El reverso de la moneda, el espejo, su oposición, es Júpiter en Leo: volverse el Niño Divino, divertirse jugando, aceptando el placer y la creatividad por sí mismos, la sabiduría como juego y/o el juego como sabiduría. O unirlos ambos, armonizando un aspecto en principio desligado: o uno u otro y… ¿por qué no ambos?
Hay muchos planetas retrógrados (aparentemente van hacia atrás): Júpiter, Plutón, Marte y Saturno lo que quiere decir que enlazan con energías o experiencias del pasado. Al colocar las energías de estos planetas, vivenciándolos, estaremos recolocando, resintiendo, reviviendo, resolviendo,las anteriores como una, en una especie de cuerda espacio-temporal.
Plutón queda exactamente en el cúlmen de la casa X. La casa X representa lo externo, lo profesional, la vida común, la política, la vida pública, lo vocacional y la coherencia con lo interno. Como Plutón es el gran transformador se espera el inicio de alguna transformación o empoderamiento personal, grupal, social.
Temas políticos, de trabajo, de coherencia, vocacionales llegan a su culmen. Ni bueno ni malo, no hay juicio, empoderarse o transmutar, es el momento.
Saturno, lo denso, lo establecido, limita el poder de Júpiter actuando de ancla para la poderosa energía de este mapa, al tiempo que densifica el amor y lo trae a este plano (trino con Venus-Urano). El amor se demuestra, se materializa, se plasma.
Potente luna llena de Abril. Dado que la energía ni se crea ni se destruye, toda esta energía se manifestará en un tipo de evolución, hacia dentro o hacia fuera, en una dirección u otra. La ecuación de decisión de cada cual es la que determinará la forma, la dirección y su amplitud.
Mágica, energética y especial luna llena de Abril.