El arquetipo solar tiene muchas ramificaciones, porque es un arquetipo muy básico.
Todo nuestro universo es una gran polaridad, Padre, Madre: grande, chico; Luz, oscuridad, Cielo, Tierra, Calor, frío…… Yang, Ying.
De esa polaridad básica devienen muchas otras divisiones.
Un arquetipo básico descompensado, es decir, desequlibrado, que no realiza bien su función, expresará esa misma descompensación en la gran parte de facetas de nuestra vida.
Expresamos nuestros arquetipos en función de lo aprendido de nuestra cultura, familia, clan….. cuando somos NIÑOS….por impronta. En la etapa infiantil no somos capaces de juzgar, sino sólo de absorber.
Muchas resistencias vienen de no querer mover «eso» que aprendimos por impronta, ya que sería como remover los cimientos de la casa. Tenemos miedo al desequilibrio posterior.
Los arquetipos más básicos se expresan en astrología con el SOL y la LUNA. Sólo tenemos que mirar al cielo para darnos cuenta de su importancia simbólica en nuestras vidas en relación al firmamento.
Analicemos algún aspecto muy básico del arquetipo SOL:
La función SOLAR representa a nuestra parte creadora, divina. El Sol representa la energía fuego, la menos densa de los cuatro elementos. El Sol simboliza el estado fuego o plasma de la materia. Están también el aire o mente, el agua o emoción y tierra o sólido y los actos.
El Sol es más creador porque está en un estado más inestable, más sutil, y por eso tiene esa capacidad de creación y maleabilidad… el oro es su símbolo… tiene sus cualidades, representa la eternidad… permanece inalterable (en comparación con los otros metales) al paso del tiempo…, hay que hacer aleaciones con otros metales para endurecerlo y es brillante, amarillo, como la luz solar.
Hay un aspecto muy poderoso relacionado con el SOL y es nuestro LIBRE ALBEDRÍO. Esta cualidad humana nos pone en conexión con nuestra parte divina.
La imagen del arquetipo solar en astrología es un punto rodeado de un círculo. El punto es la divinidad y el círculo representa su creación, el universo. Expresa esta cualidad. Sin libre albedrío no podemos crear. Sin libre albedrío somos esclavos de la intención de otros. Del SOL de otros.
Es por esto que cuando perdemos el LIBRE ALBEDRÍO sea o no con nuestra participación consciente, estamos cerrándonos a una parte creadora y por lo tanto, divina.
También cuando queremos influir en el libre albedrío de otros, estamos cercenando su parte divina. Eso no quiere decir no dar educación a nuestros hijos Un niño necesita esa impronta como base de su carácter adulto.
Cualquier descompensación energética o vibracional en un arquetipo se traslada a sus ramificaciones, por frecuencias, ciclos, como los ciclos de traslación de los planetas que se relacionan a su vez con experiencias en nuestras experiencias personales. Eso que en astrología se suele definir como «pronósticos»
Cuando tenemos un arquetipo de ABANDONO o bien de AUSENCIA Paterna en algún punto también tendremos el patrón interno que lo mueve, más sutil, pero origen del resto.
¿Te han abandonado o se ausentaron aquellos cuya misión era protegerte a lo largo de tu vida? El arquetipo de un padre, o quien hizo las veces…sea una o más personas, hace el enorme favor de encarnar una energía para que podamos verla, y por ende comprenderla y evolucionarla. De otro modo sería imposible.
En qué medida nos abandonamos, nos ausentamos de nsotros mismos….. o aceptas tu parte divina, creadora de tu realidad.
El stress y el parloteo mental nos alejan y dificultan la relación con lo que verdaderamente somos. El parloteo mental suele ser un reflejo de patrones aprendidos por impronta. En ocasiones conflictivos entre sí y con nosotros.
El Sol, el fuego, representan la intención, la motivación, la energía con que algo comienza, su origen su para qué, y por lo tanto, su desenlace. En este punto se basa la astrolgía. la astrología estudia el cielo cuando algo comienza, sea lo qeu sea, porque en el principio está la semilla, el origen y el final de todo.
En la medida en que la astrología o cualquier otro sistema nos sirva para comprender e interprender el idioma de nuestra parte solar, creadora, la entendemos valiosa.
La Madre manipuladora o que se deja manipular y el Padre Ausente o Autoritario en exceso son dos caras de una misma moneda de la polaridad más básica de nuestra percepción humana de la realidad. Ninguna parte de la polaridad está más desequilibrada que la otra, ambas son un espejo. Ninguna cumplen fluidamente con su función.
La que estamos analizando ahora es la de PROTECCIÓN, del Padre.
Estamos permenentemente creando una realidad, la pregunta es si esa realidad es la nuestra o nos roban ese poder. Como decía Morfeo en la película Matrix… somos baterías, pilas o combustible para la creación nuestra realidad o….., la de otros.
Las guerras de sexos se extrapolan a nuestra realidad más íntima y personal, verdadero origen de nuestro problema. No hay salvadores externos en este caso, el Sol brilla por sí mismo. Decidir en lo sutil es la chispa de la creación y usar nuestro poder de libre albedrío es una función solar, es la función de la autoridad.
La función paterna puede ser encarnada por el género femenino, aunque su energía basica siga siendo de polaridad paterna, masulina, solar, yang. Por ejemplo, una mujer-jefa.
Es la función, no el género o la forma, lo determinante en los aquetipos. Un arquetipo une aquello que tiene la misma función simbólica sin tener en cuenta los elementos o estado de la materia: si es más o menos sutil.
Lo importante en el sueño es el «para qué», no el «qué». Papá es aquello que nos protege y marca una autoridad si cumple bien su función: un padre, maestro, jefe, juez, Dios.
En la medida que nuestra decisión se conecte con el verdadero SER y seamos libres de reconocer los diferentes Patrones que nos influyen, llegaremos a lo que representa nuestro SOL en nuestro mapa «astronómico-astrológico»
El Sol en astrología simboliza el alfa y el omega. Lo que perdura en el tiempo. Lo que somos y a lo que llegaremos.
Cada Sol por su configuración en el momento del nacimiento y su relación con todo el fondo del cielo marca un Patrón.
Todo es importante en ese patrón, un cometa, una nube estelar o una estrella fija. El universo es un holograma y es fácil de comprobar comparando que los patrones de lo muy pequeño y lo muy grande tienen una simetría común muy evidente.
En el camino del encuentro con nosotros mismos, demos gracias a las experiencias, por duras que sean, que nos hicieron comprender, plásmándolo fuera, lo que nos hacemos dentro….
y mirémoslas sin juicio, comprendiendo lo valioso de la lección aprendida, a los ojos del SER.